El zinc es un mineral que juega un rol muy importante en ayudar a fortalecer el sistema inmune y en mantener la buena salud en la vida cotidiana. Por ejemplo, el zinc puede ayudar a producir glóbulos blancos y a mejorar su función. Además, el zinc tiene propiedades antioxidantes que pueden ayudar a proteger las células del daño de los radicales libres.
Durante el invierno, la vida cotidiana se puede transformar en un desfile de enfermedades.
Y si bien hay medidas temporales que podemos tomar para prevenir, la más importante es mantener un sistema inmune fuerte y saludable.
Para lograrlo, es fundamental llevar hábitos saludables en la vida cotidiana, como hidratarse, dormir lo suficiente y mantenernos activos.
También, minerales como el zinc -que adquirimos por la alimentación- pueden ayudar a mantener fuerte nuestro sistema inmune.
Zinc en la vida cotidiana: ¿cómo puede ayudar a prevenir las enfermedades de invierno?
Puede ayudar a combatir las infecciones.
Una de las funciones del zinc es que puede ayudar a producir glóbulos blancos, que son fundamentales para combatir las infecciones.
Por lo tanto, tener un nivel saludable de zinc en nuestro organismo nos puede ayudar a aumentar la cantidad de glóbulos blancos que recorren el cuerpo buscando microorganismos infecciosos.
También, puede ayudar a que funcionen bien.
Además de ayudar a fomentar su producción, el zinc puede ayudar a que los glóbulos blancos funcionen correctamente.
En otras palabras, el zinc puede ayudar a que los glóbulos blancos circulen por todo el organismo en busca de infecciones y las puedan combatir.
El zinc puede ayudar a cuidar las células de la oxidación de la vida cotidiana.
Factores de la vida cotidiana, como por ejemplo, la contaminación, el humo de cigarrillos, los rayos UV y los alimentos ultraprocesados, pueden hacer que nuestro cuerpo libere radicales libres.
Los radicales libres pueden provocar daño celular y, como resultado, afectar nuestro sistema inmune.
Un nivel saludable de zinc en nuestro organismo puede ayudar a prevenir el daño celular, gracias a que es un gran antioxidante.
Los antioxidantes son fundamentales para reducir el efecto de los radicales libres.
Alimentos con zinc.
Diferentes alimentos que podemos consumir en la vida cotidiana contienen zinc, por ejemplo:
- Almejas.
- Carnes rojas de vacuno y cerdo.
- Huevos.
- Carne de pollo.
- Porotos.
- Lentejas.
- Garbanzos.
- Almendras.
- Maní.
- Semillas de zapallo y maravilla.
- Yogur, queso, leche.
- Avena integral.
- Arroz integral.
- Quinoa.
Sin embargo, si nuestra alimentación no cubre las necesidades de zinc, con supervisión médica puedes apoyarte en un suplemento alimentario que lo contenga.
Baya de saúco negro: un gran súper poder, en un pequeño fruto.
Este fruto, también llamado Black elderberry, contiene muchos nutrientes que pueden ayudar a fortalecer el sistema inmune.
La baya de saúco negro contiene, por ejemplo:
- Hierro.
- Calcio.
- Magnesio.
- Fósforo.
- Potasio.
- Antioxidantes.
- Vitamina A, C y E.
El suplemento alimentario Sambucol está hecho a base de bayas de saúco negro y, además, está fortificado con zinc.
Sambucol ayuda a fortalecer las defensas de tu familia y los protege contra los síntomas causados por los virus típicos del invierno.
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